El proyecto contribuye a la solución del problema a través del incremento en el ingreso mensual por medio de la comercialización del excedente de la siembra y cosecha de hortaliza orgánica, semilla criolla y composta de los pequeños agricultores; empleando a los mismos agricultores en la producción (limpieza y empaque) de las hortalizas. Lo anterior se realizará por medio de capacitaciones, iniciativas de emprendimiento y alianzas con puntos de venta para los productos, con ello los pequeños agricultores se verán beneficiados y experimentarán crecimiento principalmente en el ámbito económico, pero también en el social y personal. Trabajar en una red de pequeños agricultores también fortalecerá las relaciones de la comunidad, y propiciará un entorno apto para el desarrollo económico y social de la región.